+1 800 972-5442 (en español)
+1 800 876-9880 (en inglés)
ALIMENTO DIARIO
Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad. 1 Juan 1:8-9Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad. 1 Juan 1:8-9
¡Soy pecador! Y ahora, ¿qué hago? Dios conoce todo lo que hacemos y dejamos de hacer, todo lo que pensamos y lo que deseamos. Sería tonto pensar que podemos esconder nuestros deseos y pensamientos de él, sería como tratar de «tapar el sol con un dedo». Entonces, sabiendo que somos pecadores, ¿qué debemos hacer?
El primer paso es reconocer que lo somos, y el segundo es arrepentirnos. El arrepentimiento es sentir congoja por el error cometido, sea en pensamiento, palabra o acción, y tener el deseo sincero de no cometerlo nuevamente. Jesús sufrió y murió en nuestro lugar para darnos el perdón de todos nuestros pecados. Confiando en esta verdad, tendremos siempre la oportunidad de un nuevo comienzo.
ORACIÓN: Querido Dios, reconozco que cometo muchos pecados. Ayúdame a hacer cada vez más tu santa voluntad. En el nombre de Jesús. Amén.
© Copyright 2014 Cristo Para Todas Las Naciones