"Las llaves del cielo"

A ti te daré las llaves del reino de los cielos (Mateo 16:19a).

El 29 de julio de 1958, el presidente Dwight D. Eisenhower firmó la ley que creó la NASA, abriendo las puertas a una nueva era de exploración y avances tecnológicos. Desde entonces, la NASA ha sido responsable de descubrimientos científicos, satélites que mejoran las comunicaciones, tecnología que beneficia la medicina y la ingeniería, y un mejor entendimiento del universo. Pero para que todo esto fuera posible, alguien tuvo que dar la orden, establecer la autoridad y proporcionar las herramientas necesarias.

En el mundo antiguo, las llaves eran grandes piezas de madera o metal que un administrador podía cargar sobre su hombro, indicando su autoridad y acceso. Las llaves que menciona el versículo de hoy no fueron dadas solo a Pedro, sino a toda la Iglesia, para proclamar el Evangelio y administrar el perdón de los pecados en nombre de Cristo. Jesús dio la orden, estableció la autoridad y proporcionó las herramientas necesarias.

Jesús le da a su Iglesia dos llaves: una llave absuelve del pecado y abre el cielo a quienes se arrepienten. La otra llave retiene los pecados y cierra el cielo a los impenitentes.

Cuando el Evangelio es proclamado y el perdón es anunciado en su nombre, es Cristo mismo quien abre las puertas del cielo. Y cuando alguien rechaza el arrepentimiento, no es la Iglesia quien lo cierra, sino el propio rechazo del pecador a la gracia de Dios.

Así como la creación de la NASA permitió avances que cambiaron la vida de millones, el Oficio de las Llaves es un regalo divino que transforma vidas hoy. Cada vez que recibes el perdón de Cristo, experimentas el poder de la llave que abre el cielo para ti.

Ahora puedes compartir el regalo de esta noticia con alguien más.

Padre nuestro, gracias porque en Cristo nos das el perdón y la salvación, abriendo para nosotros las puertas del cielo. En el nombre de Jesús. Amén.

Para reflexionar:
* ¿De qué manera puedes vivir hoy confiando en la obra de Cristo y en los medios de gracia que Él nos ha dado?
* ¿De qué manera los medios de gracia siguen fortaleciendo tu fe y te capacitan para vivir como hijo de Dios?

Diaconisa Noemí Guerra

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