ALIMENTO DIARIO

  • "Estén siempre alegres"


  • septiembre 28, 2008
  • Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:16-18Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:16-18


  • Siempre se espera que los casamientos sean ocasiones alegres, y la mayoría de las veces lo son.

    Pero recuerdo uno que pintaba a terminar en catástrofe. Era el casamiento de Nicole Contos, quien iba a casarse en una iglesia en Manhattan, New York.

    Tanto Nicole como los 250 invitados llegaron para el casamiento. Sólo una persona no llegó: sí, quien nunca llegó fue el novio. Nadie sabía dónde estaba, al menos ese día. Más tarde se supo que se había ido a Tahití, el lugar que habían elegido para ir a pasar la luna de miel.

    Nicole se quedó plantada sin casamiento, y con una fiesta de cien mil dólares. ¿Qué hizo? Con mucho coraje, dijo: «La comida está lista, las bebidas están frías. Sigamos adelante con la fiesta». Y así lo hizo.

    El ejemplo de Nicole refleja la actitud de los cristianos que entienden las palabras de Pablo con que comenzamos esta devoción: «Estén siempre alegres». Todos pasamos por momentos en los que la vida nos sorprende con cosas que no esperábamos y que echan por tierra los planes que teníamos. ¿Cómo reaccionamos?

    «Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación…»

    ¿Difícil? No tanto, si recordamos que gracias al sacrificio, muerte y resurrección de Jesús, hemos sido perdonados y reconciliados con Dios. Por eso podemos decir, junto con Pablo: «Lo que sufrimos en esta vida es cosa ligera, que pronto pasa; pero nos trae como resultado una gloria eterna mucho más grande y abundante» 2 Corintios 4:17 (DHH).

    De una devoción escrita originalmente para «By the Way»

    ORACIÓN:Querido Señor Jesús, tú sabes las dificultades que me afligen. Ayúdame para que no olvide que en ti siempre puedo alegrarme, sean cuales fueran las circunstancias que me tocan vivir. En tu nombre. Amén.