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ALIMENTO DIARIO
Y, por medio de él, reconciliar consigo todas las cosas, tanto las que están en la tierra como las que están en el cielo, haciendo la paz mediante la sangre que derramó en la cruz (Colosenses 1:20 CST).
Este domingo es el último domingo del año eclesiástico y recordamos que Jesucristo reina, soportando la cruz, su desprecio y vergüenza.
Conozco a una madre cuya historia me marcó para siempre. Sus hijos fueron secuestrados cuando eran pequeños. Pasaron veinte años, y, aun así, ella seguía buscándolos sin descansar. Nunca perdió la esperanza. Una vez le dije, con el corazón en la mano: “Si no los ve en esta tierra, los verá en el cielo”. Pero ella me miró con una convicción tan firme y serena, y me dijo: “No… los voy a ver aquí, en esta tierra”.
Lo increíble es que sus hijos, que estaban en México, también la estaban buscando. Al crecer, alguien les mencionó que su mamá era de Estados Unidos. Sin saber cómo, decidieron venir, y casi de forma milagrosa encontraron a una tía. Lo demás es historia. Esa madre persistente se reencontró con los hijos que le habían sido arrebatados de niños. Yo sé que no todas las historias de secuestro tienen un final así, pero esta me recuerda al amor de Dios, que nunca se rinde con nosotros.
La lectura de hoy nos habla precisamente de ese amor que no se cansa. Jesús, con su sangre en la cruz, reconcilió consigo todas las cosas. Este es el acto central de nuestra fe: Cristo mismo, Dios hecho hombre, reina desde el madero, haciendo la paz verdadera.
Él no espera que tú vengas perfecto; Él viene a ti en su Palabra, en el Bautismo, y en la Santa Cena. Ahí te reconcilia, te perdona y te da una nueva vida. Y cuando fallas te sigue formando con amor y firmeza, te sigue buscando como esa madre persistente.
Padre nuestro, gracias por Tu Hijo, porque reconciliaste por medio de Él todas las cosas, tanto las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz con nosotros mediante la sangre que Él derramó en la Cruz. Amén.
Para reflexionar
* ¿A quién estás llamado a seguir amando hoy?
* ¿Qué medio de gracia puedes buscar esta semana para recibir la paz de Cristo?
Diaconisa Noemí Guerra
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