"Con la armadura de Cristo"

Por lo tanto, echen mano de toda la armadura de Dios para que, cuando llegue el día malo, puedan resistir hasta el fin y permanecer firmes. Efesios 6:13Por lo tanto, echen mano de toda la armadura de Dios para que, cuando llegue el día malo, puedan resistir hasta el fin y permanecer firmes. Efesios 6:13

Éfeso era una de las ciudades importantes del Imperio Romano. Además de la importancia política y económica, también tenía su lado místico y religioso: allí se encontraba el famoso templo de la diosa Diana. Ese era el principal atractivo turístico de la ciudad, afectando inclusive las actividades de muchos cristianos. El apóstol Pablo había trabajado en la congregación de Éfeso, y conocía muy bien los desafíos de sus congregados. Como no quería que se alejaran de la fe los desafía a que estén preparados, diciéndoles: «…echen mano de toda la armadura de Dios…» (Efesios 6:13).

Es que cada día somos atacados por conceptos e ideas que quieren alejarnos de la fe en Jesucristo. Por lo tanto, nosotros también necesitamos estar preparados, pero no con nuestros propios méritos y esfuerzos, sino con las armas que Dios nos da. Dios envió a su propio hijo, Jesús, para que venciera a nuestros enemigos en la cruz y resucitara mostrando así su victoria sobre el pecado, el diablo y la muerte. Con fe en Jesús, nos ponemos la armadura de Dios y estamos protegidos.

ORACIÓN: Gracias, Señor, pues pusiste en mi vida las armas para mantenerme en la fe, aun en los momentos más complicados. Por Jesús. Amén.

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