
"Una esperanza viva"

Lunes de Pascua
"Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que por su gran misericordia y mediante la resurreción de Jesucristo nos ha hecho nacer de nuevo a una esperanza viva, para que recibamos una herencia incorruptible, incontaminada e imperecedera. Esta herencia les está reservada en los cielos a ustedes, que por medio de la fe son protegidos por el poder de Dios, para que alcancen la salvación, lista ya para manifestarse cuando llegue el momento final." 1 Pedro 1:3-5
¡Ha resucitado! ¡Cristo ha conquistado la muerte! A veces pienso que no estamos seguros de lo que esto realmente significa para nuestras vidas. La mayoría de nosotros, sabiendo de la muerte y resurrección de Cristo, diremos que estamos perdonados y que pasaremos la eternidad con él. Su resurrección, sin embargo, significa mucho más. Como dice Pedro, es "una herencia incorruptible, incontaminada e imperecedera". Recibimos más que vida nueva y eterna; recibimos cuerpos nuevos y el privilegio de ser parte de una nueva creación. En Cristo todo será restaurado y hecho nuevo. ¡Ésta es la promesa por la cual esperamos, pero también una promesa que tenemos ya ahora! ¡Éstas son buenas noticias!
Porque somos bautizados en Cristo, participamos en su muerte y resurrección. Somos ahora una nueva creación; somos justos, y participamos activamente en restaurar el reino de Dios sobre la tierra. Así es el discipulado cristiano, lleva la palabra que restaura y la vida de Cristo a otros, para que también ellos puedan celebrar la resurrección de Cristo, ¡no sólo en el futuro sino ahora! Usted es una nueva creación. Viva su nueva vida santa y comparta la luz de la resurrección del Señor con todos aquellos que tan desesperadamente necesitan de su amor y del nuestro.
Querido Padre celestial, te pido que continúes fortaleciendo mi fe. Ayúdame a celebrar y a compartir tu gloriosa resurrección con quienes me rodean. Gracias por conquistar la muerte y por darme una herencia que es incorruptible, incontaminada e inmarchitable. Amén.
Pastor Martin Danner
© Copyright 2016 Cristo Para Todas Las Naciones