ALIMENTO DIARIO

  • "Nunca se rompe"


  • agosto 20, 2011
  • "No te desampararé, ni te abandonaré". Así que podemos decir con toda confianza: "El Señor es quien me ayuda; no temeré lo que pueda hacerme el hombre." Hebreos 13:5b-6"No te desampararé, ni te abandonaré". Así que podemos decir con toda confianza: "El Señor es quien me ayuda; no temeré lo que pueda hacerme el hombre." Hebreos 13:5b-6


  • Hace ya unos años que visité los monasterios en las montañas de Meteora, en Grecia.

    Es un lugar muy interesante pues es casi inaccesible, lo que les da a los monjes la oportunidad de apartarse de las preocupaciones del mundo exterior y disfrutar de soledad, austeridad, y seguridad.

    Hasta el siglo pasado, tanto los visitantes como sus cosas tenían que ser alzados en una canasta atada a una polea y tirada por los mismos monjes, lo cual podía llegar a ser una experiencia un tanto aterradora.

    Se dice que, cuando iba más o menos a mitad del recorrido, un turista que se había atrevido a subir, de pronto se puso muy nervioso al notar que la cuerda que sostenía la canasta no estaba en buenas condiciones, sino que se veía vieja y deshilachada.

    Para tratar de calmarse, le preguntó al monje que lo acompañaba con qué frecuencia cambian la soga. Después de pensarlo un momento, el monje le contestó fríamente: «¡Sólo cuando se rompe!»

    Cuando nuestra vida depende de la fortaleza de la soga que nos sostiene, una respuesta así no nos tranquiliza ni nos da ninguna seguridad, ¿verdad?

    Quizás esa también sea la razón por la cual muchos de nosotros nos sentimos inseguros en la vida.

    Haga un poco de memoria. ¿Cuántas personas o circunstancias le han desilusionado? Quizás un amigo le defraudó, o perdió algo valioso, o el trabajo no era lo que esperaba.

    Lamentablemente, muchas personas sienten que toda su vida ha sido un desastre… porque ponen toda su confianza en sogas que eventualmente se rompen.

    Es por ello que el amor de nuestro Señor es tan increíblemente importante. La gracia que nos da Dios es constante. No hay ningún riesgo que se vuelva frágil, ni que envejezca, o se rompa.

    El autor de la carta a los Hebreos entendió perfectamente la solidez del compromiso de nuestro Señor con su pueblo, al declarar: (dado que Dios ha dicho) «No te desampararé, ni te abandonaré», (nosotros podemos decir con toda confianza: «El Señor es quien me ayuda; no temeré lo que pueda hacerme el hombre».

    Entonces, ¿que nos pueden hacer las personas? Nos pueden defraudar. Pero el amor demostrado por Dios en la crucifixión y resurrección de Cristo, no nos abandonará nunca.

    ORACIÓN: Dios y Padre celestial, en un mundo donde son tan pocas las cosas constantes con las que podemos contar, es bueno saber que estás siempre con nosotros. Cuando parece que todo el mundo nos abandona, tú eres fiel. Ayúdanos a serte fiel y a no abandonarte nunca. En el nombre de Jesús. Amén.

    © Copyright 2011 Cristo Para Todas Las Naciones