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ALIMENTO DIARIO
Ustedes han oído que fue dicho: "Amarás a tu prójimo, y odiarás a tu enemigo". Pero yo les digo: Amen a sus enemigos, bendigan a los que los maldicen, hagan bien a los que los odian, y oren por quienes los persiguen. Mateo 5:43-44Ustedes han oído que fue dicho: "Amarás a tu prójimo, y odiarás a tu enemigo". Pero yo les digo: Amen a sus enemigos, bendigan a los que los maldicen, hagan bien a los que los odian, y oren por quienes los persiguen. Mateo 5:43-44
Una villa en Pakistán ha establecido una organización de resistencia contra el talibán, lo cual es algo que requiere mucho valor. La semana pasada, lograron matar a dos miembros del talibán y destruir tres de sus escondites.
El talibán, por su parte, respondió de la única manera que sabe hacerlo. Convocaron a uno de sus voluntarios, lo convirtieron en un hombre bomba llenándolo de 22 libras de explosivos, y le dijeron que fuera a adorar a la mezquita de esa villa.
En la mezquita había alrededor de 300 personas… hombres, mujeres, y niños, adorando a su señor, cuando ese hombre bomba detonó los explosivos y logró morir como mártir, matando también a más de 50 personas, e hiriendo a más de 120.
Con mucho orgullo, el talibán dijo que tal represalia había tenido una parte una venganza. En otras palabras, ojo por ojo, diente por diente.
Lamentablemente, quienes actúan así, y esto incluye a la mayor parte de la humanidad, no se dan cuenta que, al final, todos terminan ciegos y sin dientes.
En contraste con lo que la lógica humana dice que es razonable o justo, tenemos lo que el Salvador dice: que amemos a nuestros enemigos, y que oremos por quienes nos persiguen.
Es cierto que no es nada fácil de hacer. Pero la Escritura nos dice que Jesús lo hizo. Aún en medio del sufrimiento de la cruz y de las burlas de quienes se alegraban en su agonía, Jesús oró aún por los que lo consideraban un enemigo y que eran los responsables de su situación.
Y todavía más. Jesús fue a la cruz cargando con los pecados suyos y míos, y con los pecados de todo el mundo. Todas las rebeldías que nos alejaron y alejan del Padre estuvieron allí ese día. Jesús murió para que nosotros pudiéramos ser perdonados y adoptados nuevamente en la familia de la fe. Jesús murió para que podamos ser salvos.
Amen a sus enemigos.
Es una cosa más que diferencia al cristianismo del talibán… y a los cristianos de los hombres bomba.
ORACIÓN: Señor Dios, no es fácil amar a nuestros enemigos ni orar por quienes se abusan de nosotros. Es por ello que te pedimos que nos llenes con tu Espíritu Santo, para que nos dé la fe que necesitamos para seguir el ejemplo del Salvador. En su nombre. Amén.
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