"Un alto antes de avanzar"

Por tanto, examínese cada uno a sí mismo, y entonces coma del pan y beba de la copa (1 Corintios 11:28 LBLA).

Como familia misionera, nos ha tocado vivir en varios estados y ciudades diferentes. Y como nuestras familias están lejos, casi siempre hacemos viajes largos en carro para visitarlas. Antes de cada viaje, revisamos bien el motor, llenamos el tanque de gasolina y nos aseguramos de tener clara la ruta. Necesitamos hacer un alto antes de avanzar.

Algo muy parecido sucede con la Santa Cena. Auto examinarnos antes de recibirla es como hacer una revisión completa antes de emprender un viaje importante. No basta con tener el tanque lleno; hay que revisar el motor y tener una dirección clara. Así también, nos preparamos espiritualmente para acercarnos a la Mesa del Señor:

– Revisamos el motor (el corazón) para ver si hay fallas: ¿Estamos conscientes de nuestros pecados? ¿Nos pesa haber fallado?

– Verificamos el combustible (la fe): ¿Creemos en Jesús y en su promesa de perdón en la Santa Cena? El mejor vehículo no sirve sin combustible, y nuestra fe en Cristo es lo que nos mueve a recibir Su gracia.

– Confirmamos la dirección (la intención de vida nueva): ¿Hacia dónde queremos ir después del Sacramento? ¿Queremos seguir el camino del perdón y resistir al pecado?

Jesús vivió sin pecado, entregó Su vida por ti y ahora, mediante Sus medios de gracia Él te capacita para vivir como hijo perdonado. Y si durante ese chequeo espiritual te das cuenta de que has fallado, no te alejes. Jesús no te rechaza. Él te perdona y sigue fortaleciéndote.

Hagamos un alto antes de avanzar. Así como antes de cada viaje revisamos el carro para llegar bien a nuestro destino, también podemos prepararnos con alegría y confianza para recibir la Santa Cena que nos sostiene en el camino.

Padre nuestro, gracias porque en Jesús me ofreces perdón, vida y salvación en Tu mesa. Enséñame a examinar mi corazón con sinceridad, confiando en lo que Cristo hizo por mí. En el nombre de Jesús. Amén.

Para reflexionar:
* Antes de un viaje importante, ¿qué revisas primero en tu carro?
* ¿Cómo se parece eso a revisar tu corazón, tu fe y tu camino antes de acercarte al altar?

Diaconisa Noemí Guerra

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