Call Us : +1 800 972-5442 (en español)
+1 800 876-9880 (en inglés)
ALIMENTO DIARIO
No seas injusto en el juicio. No favorezcas al pobre ni complazcas al poderoso. Trata a tu prójimo con justicia. No abrigues en tu corazón odio contra tu hermano. Razona con tu prójimo, para que no te hagas cómplice de su pecado. No te vengues, ni guardes rencor contra los hijos de tu pueblo. Ama a tu prójimo como a ti mismo. Levítico 19:15,17-18No seas injusto en el juicio. No favorezcas al pobre ni complazcas al poderoso. Trata a tu prójimo con justicia. No abrigues en tu corazón odio contra tu hermano. Razona con tu prójimo, para que no te hagas cómplice de su pecado. No te vengues, ni guardes rencor contra los hijos de tu pueblo. Ama a tu prójimo como a ti mismo. Levítico 19:15,17-18
Muchas veces tratamos a las personas de manera distinta debido a su apariencia, o por causa del tipo de ropa o joyas que utilizan. Pero Dios mide a las personas de otra manera. Por ejemplo, quienes son pobres a los ojos del mundo, no son necesariamente pobres delante de Dios.
Cuando hacemos diferencias entre las personas, no estamos reflejando la voluntad de Dios. Nuestro Dios no tiene favoritos, solamente favorecidos. Y en Jesús todos somos favorecidos. Gracias a Dios no somos juzgados por nuestras apariencias o por nuestros logros. Jesús murió en la cruz por todas las personas, sin ningún tipo de discriminación. Él ama y quiere la salvación de cada todos.
ORACIÓN: Señor, el mundo discrimina a las personas. Ayúdame a imitar tu amor y a practicar la fe imparcialmente. En Jesús. Amén.
© Copyright 2013 Cristo Para Todas Las Naciones