"¿Qué es el Padrenuestro?"
Cuando ustedes oren, no sean repetitivos, como los paganos, que piensan que por hablar mucho serán escuchados. No sean como ellos, porque su Padre ya sabe de lo que ustedes tienen necesidad, antes de que ustedes le pidan. Por eso, ustedes deben orar así: "Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. Perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. No nos metas en tentación, sino líbranos del mal." [Porque tuyo es el reino, el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén] (Mateo 6:7-13).
El Catecismo Menor nos recuerda que el Padrenuestro que usamos hoy en día está basado en la oración registrada en Mateo 6. El final no está en los manuscritos más antiguos de la Biblia. Esas palabras se incluyeron al principio de la historia de la iglesia como respuesta de alabanza en la conclusión de la oración.
En el Padrenuestro, oramos para que se haga la voluntad de Dios y para que sus dones sean recibidos. Es la oración que Jesús les enseñó a sus discípulos cuando le pidieron instrucciones sobre cómo orar. Nos enseña a buscar en Dios todo lo que necesitamos. En las tres primeras peticiones, oramos por cosas relativas a Dios. En las últimas cuatro peticiones, pedimos por nuestras necesidades, tanto físicas como espirituales.
Y Jesús mismo es la encarnación de la voluntad de Dios. En su vida, muerte y resurrección, vemos la santificación del nombre de Dios, la venida de su reino y la realización de su voluntad perfecta.
Así que, cada vez que oramos de corazón el Padrenuestro, recordamos quién es Dios, qué ha hecho por nosotros y cómo nos capacita para vivir en su voluntad. Es una oración que nos invita a confiar en Dios en todas las áreas de nuestra vida.
Padre nuestro, vemos tu amor manifestado en Cristo, quien nos enseñó a orar. Gracias por capacitarnos a través de tu gracia para vivir conforme a tu voluntad, como lo hizo Jesús. Que en cada palabra de esta oración encontremos un recordatorio de tu amor constante y de nuestra dependencia total de ti. Amén.
Para reflexionar:
* ¿Qué pasos concretos estás dispuesto a tomar para incorporar los principios del Padrenuestro en tus acciones diarias?
* ¿Cómo puedes utilizar la enseñanza del Padrenuestro para fortalecer tus relaciones con los demás y reflejar el perdón y la gracia de Cristo en tu vida?
Diaconisa Noemí Guerra
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